Disfrutar de panorámicas de cine tanto de día -con los miles de colores que envuelven sus parques, rascacielos y monumentos- como de noche, entre el mar de luces de neón que inundan la capital nipona, es uno de los grandes atractivos de Tokio.
Disfrutar de panorámicas de cine tanto de día -con los miles de colores que envuelven sus parques, rascacielos y monumentos- como de noche, entre el mar de luces de neón que inundan la capital nipona, es uno de los grandes atractivos de Tokio.