A punto de cumplir 25 años, la mítica banda española Love of Lesbian -compuesta por Santi Balmes, Julián Saldarriaga, Oriol Bonet y Jordi Roig- continúa llenando recintos en la gira internacional de su décimo disco Viaje Épico Hacia La Nada (V.E.H.N.), un exitazo que ha sido disco de oro y que han paseado por Europa, Estados Unidos y Latinoamérica. Charlamos con Santi Balmes, vocalista del grupo, sobre la gira, el disco y la vida en general.
En plena cuenta atrás, ¿Qué balance hacéis de esta gira?
Cuesta hacer un resumen de todo lo vivido, la verdad. De tantas ciudades, tantas personas, tantos kilómetros recorridos. Podría resumirlo con la frase «cada vez estamos más a gusto en nuestra propia piel, y el público lo detecta y lo vive igual de gustosamente”.
¿Os ha dejado muchas anécdotas?
¿Anécdotas? Me quedo con las risas que nos pegamos en Los Ángeles cuando no pudimos abrir la llave del apartamento que habíamos contratado y acabamos alojándonos en un hostel infecto donde todos nosotros apenas nos movimos de nuestras pequeñas camas, no fuera a ser que pilláramos una cepa nueva de cualquier tipo de virus mutante. Pero en la misma ciudad los cuatro nos hicimos el mismo tatuaje, y la verdad, fue precioso, algo así como un acto de lealtad.
¿Cuál es el secreto para conectar con públicos tan distintos como pueden ser el español, el mexicano o el estadounidense?
Creo que la honestidad. El seguir hablando de nuestras calles. Siempre he creído firmemente en que a todos nos pasan las mismas cosas, independientemente de donde vivas. Vamos con la verdad por delante, aunque a veces la escondamos en letras un tanto crípticas. Creo que ese juego de descifrar-identificarte es del agrado de mucha gente.
¿Cuál es el más entregado?
El latinoamericano en general. Pero sería injusto no destacar a México como el país que expandió nuestra música por el resto de países. Sin duda es una de las mejores audiencias del mundo.
¿Cómo se hace para girar un disco durante tanto tiempo cuando el consumo de música es tan rápido y fugaz?
Eso me pregunto yo. Al final uno se da cuenta de que no hay una sola fórmula y que sigue habiendo mucha gente receptiva a nuestra manera de hacerlo. Nosotros somos fieles al estilo de hacer las cosas que nos sedujo con 14 años. No podemos evitarlo, ya es parte de nuestro ADN, y las modas son solo eso, acontecimientos pasajeros.
En 2023 celebraréis 25 años como banda, ¿cuál es la clave para seguir juntos después de tanto tiempo?
Sin lugar a dudas, dos factores: el sentido del humor, imprescindible para los momentos complicados, y una magia que se produce en el escenario que es mejor que cualquier droga.
¿Haréis algo especial para festejarlo?
Lo estamos valorando, aunque no somos muy proclives a ejercicios de nostalgia. Siempre tenemos nuevas cosas que presentar, así que, en caso de organizar algún evento conmemorativo, debería combinarse con nuestra urgencia a probar nuevos retos.
¿Qué ha sido lo más gratificante de todos estos años?
Me quedaría con la dulce sensación de lealtad forjada entre una decena de seres humanos, incluyendo a esas personas que desde hace años nos ayudan desde las sombras. Eso, en tiempos de individualidad absoluta, es muy reconfortante.
¿Encontráis inspiración en las mismas cosas que antes?
Sí. En realidad, siempre hay unos temas que se repiten constantemente en la carrera de cualquier creador, así que, lo que cambia quizás son las coyunturas.
Al margen de vuestra pasión por la música, ¿qué otras cosas os unen?
El fútbol, sí, algo tan prosaico (risas). La literatura, el cine, y también hablamos de sexo como aquella graciosa obsesión que nos hace tan ridículos y frágiles.
¿Cuál es la esencia de vuestra música?
No quiero saberlo, en serio. Desgranar el truco no es recomendable ni siquiera para el propio mago.
¿La pandemia ha cambiado en algo la forma en la que consumimos música?
Personalmente, no. Todo ha vuelto a la necesidad de experimentar en vivo que tu banda preferida vuelva a tu ciudad.
2022 ha sido el año de…
La catarsis, o la reafirmación del milagro.
¿Cómo se plantea el 2023? ¿Habrá nueva música?
Esperemos que, como mínimo, empiece a grabarse. Ideas, haberlas, haylas.