Agoney despega con Bangover, una nueva canción con letra directa y evocadora, que lleva una temática íntima a la pista de baile con mucha energía. Con una composición muy rica, y una mirada más profunda y madura, el artista canario entrelaza el sonido pop con toques funk y electrónicos para volar entre sintetizadores, guitarras, violines y cajas de ritmo a distintos tiempos.
Y esto es solo el principio porque Agoney está preparando mucha música para sacarla muy pronto, quiere que éste sea su mejor año.
¿Bangover supone un punto de inflexión en tu carrera?
Sí, es un punto y aparte. Es un nuevo empezar separado de todo lo anterior, un nuevo guion para un nuevo trabajo discográfico, un nuevo sonido y una nueva forma de crear. Este tema nació como un experimento, como una forma de demostrarme a mí mismo que era capaz de componer ese tipo de sonidos, de salirme ya de esa oscuridad de Libertad. Con Libertad ya cerré la etapa que necesitaba cerrar, la de mis inseguridades y mis miedos, y ahora vengo con ganas de pasarlo bien y expresar otras cosas que tengo dentro también.
Pero el concepto de libertad también sigue presente…
Es la sinceridad. Sí un poco sí, pero a la vez, es muy diferente.
¿Cómo definirías este tema?
Bangover es un tema empoderado, con fuerza y un poco experimental para mí porque incluso la línea vocal no es muy cantada; a veces tiene un punto más recitado, como las estrofas. Eso es un poco contraproducente para un artista que siempre se ha preocupado de que su voz esté perfecta, que brille. Y de repente hago un tema en el que, sí, canto, pero hay partes en las que hablo.
¿Eres muy perfeccionista entonces?
Sí sí sí. Por eso tardo tanto entre un proyecto y otro, le doy muchas vueltas. Y lo necesito también porque al final creo que si hiciera las cosas deprisa no estaría aquí hoy.
¿Qué tal la acogida de la canción?
¡Muy bien! Es número 1 en España, Argentina y Chile, así que estoy muy contento. Parece que la gente tenía muchas ganas de bailar, por fiiin, después de tanto tiempo (risas). Los mensajes en redes son maravillosos.
Todavía hay muchos temas tabúes. Cantarle al sexo es de valientes, ¿no?
Yo creía que no porque ya lo hacen mogollón de artistas. Tenemos muchos referentes, como Madonna sin ir muy lejos; Lil Nas lo hace continuamente… Es verdad que quizás en España no se hace tanto, pero bueno, no pasa nada (risas). Al final, el sexo es algo completamente normal, disfrutamos con él y forma parte de nuestra vida.
¿Has ido evolucionando al tiempo que lo ha hecho tu música?
Por supuesto. Yo soy compositor y también produzco la música, entonces en cada composición, en cada producción voy creciendo… La tele también me ha hecho crecer mucho y, nada, aquí estoy (risas).
¿Qué has aprendido de tu paso por Tu cara me suena?
A no tomarme tan en serio las cosas, a reírme más, a no ser tan perfeccionista porque a veces esa perfección te lleva por un camino interminable y nunca llegas al final porque a la perfección nunca se llega, así que es un bucle constante en el que siempre estás metido y no lo disfrutas tanto. Con este último paso por televisión aprendí a pasármelo bien y a disfrutar de las cosas que voy haciendo.
¿Qué es lo que más te ha divertido?
Los compañeros. Tener una Eva Soriano al lado, a Los Morancos, a David Fernandez, incluso a María, a Nía, todos son geniales. Son muchas horas muertas en el camerino esperando a que te toque y si no fuera por ellos hubiera sido mortal.
¿Te has quitado la espinita de OT?
Sí, completamente, necesitaba ir a televisión y pasármelo bien. Tengo muchas ganas de volver a televisión siendo yo, sin imitar, y ver qué pasa. Creo que sería muy bonito.
¿Y lo vas a hacer?
Yo creo que sí, claro… A ver, yo nací en televisión y volveré a la tele seguro.
¿Has ganado seguridad gracias al concurso?
Mucha mucha. Cada semana en televisión, expuesto, viendo miles de mensajes en redes, uno se va confiando y va seleccionando las cosas que son importantes y las que no, vas mejorando cada semana… Piensa que fue desde septiembre hasta marzo, muchos meses de trabajo incansable, pero con una recompensa muy grande (sonríe).
¿Estás en tu mejor momento profesional?
Yo creo que siempre lo mejor está por llegar, es bonito pensarlo. Al final te hace seguir adelante, seguir con la ilusión de crear, de levantarte cada día con ganas de más.
¿Se avecina disco?
Sí, no sé cuándo (sonríe), no sé si está cerca o lejos, pero estoy trabajando mucho para ello. Estoy muy contento y tengo mucha ilusión. Con el primer disco sufrí mucho todo el proceso, fue precioso y cuando lo ves con perspectiva piensas ‘guau lo que acabo de hacer’, pero es verdad que no pude disfrutar mucho del camino porque fueron piedras, te lo juro, fue muy complicado. Ahora siento que tengo la oportunidad de centrarme más en las composiciones y estar con la cabeza puesta en lo que quiero. La experiencia también me da otro punto de vista, así que ojalá todo vaya genial.