Cuando llega el verano, la vida se traslada al exterior. Terrazas bajo las estrellas, escapadas improvisadas al campo, cenas junto al mar o lecturas a la sombra de un árbol: los días se dilatan y la luz se convierte en el hilo conductor de cada experiencia.
Esta temporada, el diseño de autor abraza la movilidad y la libertad, con luminarias portátiles que invitan a llevar la atmósfera allá donde estemos. No se trata solo de iluminar, sino de acompañar con belleza cada momento del verano.
Por su carácter escultural y su ingeniosa funcionalidad destacamos tres piezas.
The Rugged Muse, de Tala, es una lámpara resistente y brillante como una joya industrial; su estilo metálico se impone con fuerza y refinamiento.
Con su estética robusta y contemporánea, esta lámpara LED portátil (400 lm) es ideal para acompañar aventuras sin renunciar al diseño. Resistente al agua y con acabado sofisticado.
Nans R Outdoor, de Bover, es pura artesanía mediterránea: una silueta tejida que recuerda a los faroles de las casas junto al mar.
Hecha a mano con fibra tejida, esta lámpara mezcla tradición y tecnología para decorar cualquier espacio exterior.
Knot Battery Small, de Brokis, se presenta como un objeto de deseo con alma escultórica, donde el vidrio soplado y la cuerda náutica dialogan en equilibrio perfecto. Estas lámparas no necesitan cables ni excusas: son diseño para llevar.
La tendencia de este verano es clara: menos instalaciones y más emociones. Las luminarias portátiles son el nuevo must-have del lujo funcional. No son accesorios, sino compañeros de viaje —a una azotea, a una casa rural, a un picnic junto al río— que convierten cualquier lugar en un escenario. Esta selección de Nedgis eleva lo cotidiano y demuestra que, incluso en vacaciones, el diseño sigue siendo una declaración de intenciones.