Ubicada en la Bahía de Palma, esta antigua fortaleza de 30 exclusivas habitaciones ha sido uno de los 12 alojamientos reconocidos con 2 Llaves Michelin.
La Guía Michelin ha estrenado su nueva distinción para destacar los establecimientos que sitúan el arte de la hostelería al más alto nivel y contribuir a crear experiencias únicas: la Llave Michelin. En España, 97 establecimientos hoteleros han sido galardonados con este reconocimiento en su primera edición. Entre los mejores, cinco hoteles de la gestora hotelera Marugal han recibido hasta 2 Llaves Michelín.
En Mallorca, el hotel Cap Rocat ha sido uno de esos 12 alojamientos que ha recibido 2 Llaves Michelin. Esta antigua fortaleza, declarada Bien de Interés Cultural y catalogado como Monumento Nacional, además de estar rodeado de un Área Natural de Especial Interés, configura un idilio mediterráneo de cinco estrellas donde encontrar un remanso de tranquilidad a tan solo diez minutos de la capital de Mallorca, Palma.
El hotel dispone de 30 habitaciones donde reinan la tranquilidad y la máxima privacidad, que destacan por su estilo mediterráneo, así como por sus vistas espectaculares desde algunas de sus terrazas privadas al borde del acantilado. Todas ellas aseguran una intimidad sin igual, convirtiendo cada estancia en una experiencia única.
Además, destaca el spa que ocupa el espacio que antiguamente se destinaba a la zona de aguas de la fortaleza. Cavado en las profundidades de la roca, este espacio sumergido a una profundidad de 12 metros invita a los huéspedes del hotel a vivir experiencias sensoriales y extraordinarias, iluminadas por los rayos de luz natural que atraviesan su amplio techo de cristal.
Cap Rocat es un destino en sí mismo. A través de una experiencia única, los huéspedes se sentirán parte de un viaje en el que el tiempo y el disfrute toman otra dimensión. En este interludio mediterráneo, cada rincón tiene su propia historia, entrelazada con la rica herencia de la isla.