Cuando llegan estas fechas y nos empezamos a quitar ropa es inevitable suspirar hondo ante algunas evidencias: la piel pálida y seca, la flacidez en determinadas partes y la temida celulitis.
Cuando llegan estas fechas y nos empezamos a quitar ropa es inevitable suspirar hondo ante algunas evidencias: la piel pálida y seca, la flacidez en determinadas partes y la temida celulitis.