CASA MORTERO PRESENTA SU MENÚ «GUISOS»
El proyecto de Pedro Gallego y Carmen Pereda, una joven pareja salmantina que quiso crear un espacio para que la gente comiese como en casa combina tradición e innovación para ofrecer recetas de toda la vida.
Comer bien y sentirse en casa, eso es lo que ofrece Casa Mortero, la casa de comidas en pleno centro de Madrid (C. de Zorrilla, 9). Un restaurante que lleva cinco años defendiendo la tradición con una visión actual donde los platos saben a lo que son y la cocina de siempre está presente en la mesa. Para celebrarlo, Pedro Gallego y Carmen Pereda, los salmantinos detrás del proyecto, presentan una nueva propuesta de menú pensada para los que disfrutan de los sabores de toda la vida.
Próximamente, llega el «Menú Guisos», una oda a la cocina de puchero y a esas recetas que reconfortan. Un menú de celebración con algunas de las elaboraciones más queridas de su recetario: patatas a la importancia, albóndigas o callos, entre otros platos, sin olvidar el broche final: su flan casero al aceite de oliva virgen extra. Este menú estará disponible en el servicio de mediodía, de martes a viernes, de 13:15 a 15:00, por un precio de 55€.
Casa Mortero sigue apostando por una cocina honesta, con recetas que respetan el producto y el tiempo que cada plato necesita. Porque aquí se guisa como en casa, sin prisas y con el fuego a punto.
Casa Mortero es el proyecto de Pedro Gallego y Carmen Pereda, una joven pareja salmantina que quiso crear un espacio donde la gente comiera como en casa. Un restaurante que respeta la herencia castellana, pero que no se limita a ella: su cocina recorre recetas tradicionales de toda España con una propuesta basada en la calidad del producto y en el tiempo que requiere cada plato.
Nada aquí es improvisado. Como ellos mismos dicen: «Dimos forma a Casa Mortero antes de que existiera Casa Mortero».
Desde su apertura en septiembre de 2020, este restaurante se ha forjado como un proyecto de vida. Pedro, con una amplia experiencia como cocinero y asesor gastronómico en diversos proyectos de restauración trabajando con chefs como Javi Goya, Sergi Arola, Alberto Chicote o Gordon Ramsay, y Carmen, experta en diseño, estrategia e innovación, lo han diseñado al detalle para construir no solo un restaurante, sino una auténtica casa de comidas.
El resultado es un espacio austero y coherente, en el que cada aspecto –desde la carta consistente hasta el servicio cercano y profesional– está pensado para que, desde el primer “Bienvenido” que se escucha al cruzar la puerta, el comensal se sienta acogido en esta casa.
En el centro de Madrid, este restaurante se ha convertido en una referencia para quienes buscan platos que rinden homenaje a la tradición, sin renunciar a la calidad y al cuidado del producto. Aquí, majar, guisar y rebañar son la condición sine qua non para disfrutar de recetas que, aunque de apariencia sencilla, se elaboran con tiempo, precisión y autenticidad.
Cocina y carta
La cocina de Casa Mortero se basa en el recetario tradicional, y en las técnicas de cocina de siempre, escabeches, curados, marinados, guisos o brasas. Una cocina de toda la vida, cuidada y honesta, sin pretensiones, que reconforta y traslada quizás a algún recuerdo de la cocina de nuestras abuelas. Su carta cambia dos veces al año, una en mayo y otra en octubre, y siempre cuentan con platos fuera de carta según temporada que varían en función del producto disponible.
Destacan las croquetas cremosas de jamón ibérico, la ensaladilla con atún rojo y piparra y el torrezno acompañado de patatas «meneás» de Salamanca y majado de pimentón. También hay opciones cómo el steak tartar con jugo de pimientos asados y la presa ibérica semicurada con migas del pastor y queso viejo.
Fieles a las técnicas de conservación tradicionales, Casa Mortero ofrece una variedad de escabeches. Entre ellos, la ostra en escabeche con alegrías riojanas, el atún rojo en escabeche con cebolleta ahumada y tirabeques y la pularda en escabeche sobre cogollo a la brasa y nueces.
La carta de guisos es un viaje por los sabores de la cocina española. Platos como los callos a la madrileña con pata, morro y cecina muy curada, las alubias rojas de Tolosa guisadas a la brasa con sus sacramentos y el arroz de pato con espárragos trigueros, queso cremoso y pieles crujientes son muestra de ello. Otros destacados incluyen las pochas con almejas y alcachofa frita y el rabo de vaca guisado con jugo al vino oloroso.
Para los amantes de las brasas, Casa Mortero propone propone producto de primera como la molleja de ternera con crema de maíz, col encurtida y jugo de membrillo, el vacío de vaca vieja con chimichurri o el rodaballo a la brasa con patatas panaderas y bilbaína.
La comida siempre se completa con guarniciones de toda la vida como patatas fritas o pimientos del piquillo a la brasa. En los postres, elaboran su tarta de queso cremosa con helado de toffe, el flan de leche tostada al aceite de oliva virgen o la torrija caramelizada con mermelada de manzana y helado de galleta.