Así tienes que cuidar el pelo para que, después de un largo verano, no sienta el cambio de estación.
Hace ya tanto tiempo que se ha acabado el verano (más bien las vacaciones, porque el calor sigue con nosotros) que ya ni nos acordamos. Eso sí, quien tiene memoria es el pelo y, del mismo modo que nota los estragos de tanta exposición al sol, también percibe que octubre ya está aquí. ¿Notas que, en las últimas semanas, tu pelo no es el mismo? Las expertas en belleza revelan por qué octubre es un mes crítico para la caída del pelo y, ojo, que lo primero que tenemos que hacer es mimarlo desde la raíz. Y nunca mejor dicho.
El pelo siente y octubre es clave
A ver, seamos realistas, el pelo no duele, cierto, pero eso no significa que no sienta, de hecho, todo lo que le rodea, le afecta. Y el otoño no iba a ser menos. Precisamente por eso se nos cae más el pelo en unas épocas que en otras y el inicio del otoño es una de ellas.
Octubre supone darse de bruces con la realidad: el verano ya se ha acabado y toca hacer reset. “Durante el verano hemos abusado del sol, sí, pero también hemos intentado proteger el cuero cabelludo de quemaduras con protector solar y protectores térmicos que se adhieren el cuero cabelludo. Llegados este punto, toca hacer una limpieza profunda que solo se consigue con la ayuda de exfoliantes capilares y que nos hará hacer ese reteseo que el pelo tanto necesita”, comenta Raquel González, cosmetóloga y creadora de Byoode.
Los días son más cortos, nos toca volver a la rutina y la transición del verano al otoño trae consigo cambios que, a priori, apenas tienen importancia. ¿O sí? Todos los cambios nos afectan y el pelo no es ajeno a ello. La vuelta a los madrugones, a los atascos, el trabajo, el gimnasio… Intentamos hacer encaje de bolillos para cuadrar y que nos dé tiempo a todo. Y “esto genera un estrés que puede ser el causante de que los niveles de ansiedad y presión sean más altos y, como consecuencia, que haya pérdida de pelo. El motivo se encuentra en alteraciones en el sistema sanguíneo, los mayores niveles de cortisol…”, comenta Mireia Fernández, directora dermocosmética de Perricone MD.
Y, por si fuera poco, también puede coincidir que tu pelo, justo en el mes de octubre, se encuentre en fase telógena. O, lo que es lo mismo, que le toque renovarse. “El cabello sigue un ciclo de crecimiento natural que consta de tres fases: anágena (crecimiento), catágena (transición) y telógena (reposo y caída). La fase telógena, en la que el cabello se cae naturalmente, puede durar varios meses. Y, claro, es posible que el pelo que entró en esta fase durante el verano comience a caerse en otoño y que sea, a fin de cuentas, una pura coincidencia”, explica Estefanía Nieto, directora dermocosmética de Medik8.
Por eso, tenemos que ser conscientes de la importancia del cuidado del cuero cabelludo para evitar que la caída del cabello sea todavía mayor. “La exfoliación capilar contribuye a eliminar la acumulación de células muertas en la piel y la suciedad presente en el cuero cabelludo. Esta acumulación puede obstruir los folículos pilosos, dando lugar a problemas como la caspa, el exceso de grasa, irritación e incluso una mayor pérdida de cabello”, como señala Patricia Garín, directora dermocosmética de Boutijour.
Con qué exfoliar el cuero cabelludo
Cada dos o tres días, ya sea en formato polvo o en mascarilla, “deberíamos aplicar exfoliante capilar en el cuero cabelludo. Primero hay que humedecer el pelo y, después, para que el producto emulsione y penetre mejor, llevamos el exfoliante a cuero cabelludo. Se debe masajear siempre en círculos, pero ejerciendo poca presión. Es más importante la precisión que la fuerza”, aclara Raquel González, cosmetóloga y creadora de Byoode.