El prestigioso chef español, uno de los máximos exponentes de la gastronomía española fuera de nuestras fronteras y recientemente distinguido por el rey Felipe VI con la Cruz de Oficial de la Orden de Isabel la Católica por su labor de difusión de nuestra cultura en el mundo, acaba de abrir las puertas de un nuevo establecimiento en Londres donde ya cuenta con otros seis conceptos de éxito
De origen extremeño, José Pizarro es el gran embajador de la cocina española en Reino Unido; toda una celebridad para el gran público británico que ha dado a conocer no solo la gastronomía española y su despensa, sino también el ambiente, la forma de comer y la filosofía de cercanía y sociabilización de nuestra cultura. Cuenta con varios restaurantes en el centro y sur de Londres –José Tapas Bar, Pizarro, José Pizarro Broadgate, The Swan Inn, en Esher, José Pizarro y The Poster Bar en la Royal Academy–, así como con un restaurante, José by Pizarro, en Abu Dhabi –dentro del Conrad Abu Dhabi Etihad Towers– y una espectacular casa de huéspedes en Zahara de los Atunes (Cádiz): Iris Zahara. A este pequeño imperio el cacereño suma ahora Lolo, situado en la calle Bermondsey de Londres, a escasos metros de José Tapas Bar y del restaurante Pizarro.
El concepto de Lolo gira en torno al carácter social de la comida y tiene como objetivo servir de punto de encuentro entre los locales y visitantes de la bulliciosa Bermondsey a cualquier hora del día. Se presenta como un punto de encuentro donde los clientes pueden desde compartir un delicioso desayuno en pareja, disfrutar de un largo almuerzo en familia o tomar unos cócteles por la noche entre amigos, hasta ‘picar’ un sándwich rápido o disfrutar a solas de una buena copa de vino. La cocina de Lolo abre ininterrumpidamente de 8:00 a 21:30 horas y acoge una gran variedad de propuestas que se dividen en platos para todo el día y una oferta específica para comidas y cenas. Sus desayunos, disponibles desde primera hora y durante toda la jornada, incluyen sándwiches variados –de ternera con queso fundido y pimientos verdes confitados, de jamón 5J con queso y trufa, de atún con tomate y berros…–, repostería casera –cruasán, Kouign Amann…– y postres típicos españoles como torrija al vino tinto con helado de queso o natillas, fruta fresca aliñada con menta, pimienta negra y AOVE y una buena variedad de huevos preparados de diferentes maneras: en tortilla con salmón curado al Pedro Ximénez, con patatas fritas, cebolla caramelizada y paleta ibérica 5J, al horno con pisto o rellenos de anchoas, de bacalao con azafrán o de sobrasada picante.
La oferta de almuerzos y cenas, disponible de 12:00 a 21:30 horas non stop, engloba desde clásicos del tapeo español –gildas y otros pinchos vascos, mejillones en escabeche y sal negra con patatas fritas, etc.–, ensaladas frescas –de pulpo, con tomate asado, de alubias blancas con berenjena ahumada, de bacalao con hinojo, chile y naranja, etc.–, laterío gourmet –como anchoas del Cantábrico Gran Reserva, navajas y almejas al natural, sardinillas en AOVE, huevas de caballa o chipirones en su tinta– y tablas de quesos, embutidos y pescados en conserva y curados, hasta platos más elaborados entre los que se incluyen algunos de los favoritos de José Pizarro a nivel personal. Todas las recetas están basadas en ingredientes de primera reflejando la estrecha relación del chef con sus proveedores tanto del Reino Unido y como de España y su amor hacia ambas naciones por igual. Entre ellas destacan el tartar de lomo de atún Gadira con melocotón, el carpaccio de gamba roja del Mediterráneo con naranja y guindilla o el estofado de cerdo ibérico, elaborado con el AOVE de José Pizarro.
Para beber, Lolo cuenta con una selecta carta de vinos de la cuenca mediterránea –incluyendo vinos españoles, de La Rioja, Ribera del Duero, Ribeira Sacra, Alicante, Navarra, Madrid, Jerez y el Penedés– y cócteles de aperitivo y para acompañar la comida.
Pizarro se muestra entusiasmado de llevar este nuevo concepto a la calle que tanto adora: «Estoy encantado de traer Lolo a Bermondsey Street, ya que un lugar para comer todo el día es lo que hacía falta para la gente de la zona. El menú incluye platos sacados directamente de la cocina de mi casa y me apasiona dar vida a estas recetas en Lolo». El restaurante ofrece además un nuevo aspecto para la marca José Pizarro, con un aire mediterráneo que lo transforma de una cafetería luminosa y diáfana durante el día a un bar de vinos íntimo y con poca luz por la noche. Los tonos cálidos, crema y rosa y materiales como madera noble, piedra y azulejo se utilizan en todo el espacio para crear una atmósfera acogedora. Está salpicado además de obras de arte adquiridas por el propio José en colaboración con el artista local Norman Ackroyd. Tiene capacidad para 46 comensales y cuenta con una zona de barra para comidas rápidas y encuentros más informales.