Tras los meses fríos, el cambio de estación siempre nos pide un borrón y cuenta nueva que estamos encantados de hacer.
Nos pasa sobre todo en otoño y ahora en primavera, época ideal para hacernos un tratamiento que vaya más allá de nuestras cremitas y rutinas caseras de skincare. No te lo pienses mucho, si tienes las ganas solo es cuestión de lanzarse y… ¡disfrutar con los resultados! (Por Maika Cano).
LUMIN’ECLAT para que tu cara resplandezca
La marca parisina Maria Galland Paris acaba de llegar al WOW Concept de la calle Serrano en Madrid para ofrecer este tratamiento en cabina que activa las pieles apagadas y las llena de luz.
Se trata de un protocolo relajante y exclusivamente manual, con texturas sensoriales y una delicada fragancia floral, especialmente diseñado para revelar la luminosidad natural en una sola sesión. El resultado que se ve es un rostro más vivo, con menos líneas de expresión y con los poros y los signos de fatigas reducidos al mínimo.
El tratamiento es ideal para cualquier tipo de piel porque su objetivo es compensar los estragos que dejan en nuestro cutis situaciones como el estrés, la falta de sueño, el cansancio y la contaminación o los cambios de tiempo. Concretamente, el estrés es uno de los máximos responsables de que nuestro sistema defensivo se sobrecargue y pierda efectividad, dejando que arrugas, manchas y sequedad nos invadan.
BODY STIM para afinar tu silueta y endurecerla
El tratamiento Body Stim, de la Clínica Antiaging y Estética Avanzada Gema Cabañero tiene como objetivo poner la piel tensa, firme y tonificada, y dar como resultado una silueta más fina por el impacto que reciben los músculos.
En primer lugar, se realiza un análisis corporal a través del diagnóstico Inner Wellness para personalizar el protocolo corporal posterior. En cabina, se comienza con termoterapia endógena sobre el músculo objetivo, generando calor dentro del cuerpo para estimular la producción de colágeno y elastina y dar como resultado una apariencia más firme y tonificada de la piel. Con esta técnica también se ejerce un efecto reductor, se descomponen las células grasas para facilitar su eliminación, y en este caso el resultado es una reducción de la celulitis y de la piel de naranja. El siguiente paso es la electroestimulación muscular sobre la zona rebelde gracias a impulsos eléctricos de baja frecuencia, que provocan contracciones involuntarias en los músculos, similares a las que se producen durante el ejercicio físico, tonificando la silueta en general y dándole un aspecto firme.
Después, con diatermia por radiofrecuencia se llega a las capas más profundas de la dermis y además permite trabajar dos zonas a la vez. La presoterapia final ayuda a aumentar los resultados obtenidos, mejorando la circulación sanguínea y promoviendo la relajación y regeneración muscular.