Otazu Private Cellar es una actividad con la que degustar y adquirir nociones sobre el mundo del vino varietal en la que los integrantes podrán elaborar una barrica de 225 litros de un ensamblaje único de vino tinto, con una etiqueta personalizada, que luego recibirán en forma de 300 botellas.
El sabor y las emociones se alían en las 116 hectáreas de Bodega Otazu. Visitar sus instalaciones es un deleite para los cinco sentidos, donde cada uno encuentra su sitio sin dejar atrás ningún detalle. Un recorrido por un patrimonio histórico y por miles de historias que se esconden en las raíces de estos viñedos. La pasión y el amor por la tierra, la historia, el arte y el vino se palpa. Además, Bodega Otazu ha sido reconocida por la Asociación Española de Ciudades del Vino (ACEVIN) en los V Premios de Enoturismo ‘Ruta del Vino de España’ en 2020 como Mejor Bodega Abierta al Turismo.
Otazu Private Cellar tiene ese sabor de exclusividad que tanto potencia la Bodega Navarra. Se trata de una interesante propuesta donde los visitantes podrán descubrir los secretos de la elaboración del vino y, además, poner a prueba sus conocimientos y emociones para crear una barrica de 225 litros. A cada equipo se le entrega tres vinos monovarietales, uno por cada una de las variedades de uva cosechadas en Otazu (100% Merlot, 100% Tempranillo y 100% Cabernet Sauvignon) y, con la ayuda del equipo técnico de la Bodega Navarra, que explicará las características y cualidades de cada variedad, cada grupo tendrá que diseñar distintos ensamblajes combinando diferentes proporciones hasta lograr la mezcla perfecta. Para finalizar, se efectuará una cata a ciegas de los vinos propuestos por los diferentes equipos.
Esa barrica privada al gusto de 225 litros será custodiada en su Catedral del Vino durante todo el proceso de crianza. Los participantes, como parte de este proceso exclusivo y cuidado al detalle, firmarán también la barrica y tendrán la oportunidad de diseñar la etiqueta de las botellas. Solo cuando el vino está en su momento perfecto, el personal de Otazu lo embotella y las 300 botellas resultantes se etiquetan y se hacen llegar a los participantes.
Una experiencia, por lo tanto, que se extiende en el tiempo y que mantendrá la expectación hasta el momento de degustar, ya en casa, el resultado de esta extraordinaria vivencia.
De esta forma, Bodega Otazu se consolida como el destino perfecto para todo tipo de actos corporativos, visitas y eventos, no solo por sus vinos con D.O.P., sino también por sus actividades y espacios, que aúnan la belleza de un valle idílico junto a la tradición y el patrimonio histórico del Señorío de Otazu, el arte contemporáneo de Fundación Otazu y la gastronomía navarra.