Begoña Rodrigo, nombrada Mejor Chef Mujer de Europa por We’re Smart World, estrena una propuesta de chacinería vegetal en su restaurante La Salita con elaboraciones como el pastrami de raíz de apio, la sobrasada de calabaza, el paté de setas y caña de rábanos o la caña adobada de nabo.
Para Begoña Rodrigo el mundo vegetal representa el epicentro de su cocina y así lo demuestra una vez más con su propuesta de chacinería vegetal, disponible en el restaurante desde finales de enero, fecha en la que renovaba sus menús para esta temporada.
Con esta apuesta, la chef no ceja en su empeño por trasladar su pasión por las verduras “en ocasiones erróneamente denostadas por estar sobrecocinadas y tener un aspecto poco atractivo.” – declara. “Buscamos el punto de cocción perfecto, para que no salga la fructosa que no debe. Con los embutidos vegetales queremos sorprender en texturas, sabores y apariencia” – añade.
Algunas de las propuestas sobre la mesa son la sobrasada de calabaza, cuya carne, tras ser cocinada a la sal, se seca para agregar chalotas, piñones y especias, o la caña adobada que parte de la fermentación de 12 horas de un nabo daikon. El pastrami, con una versión de rábano y sandía y otra de raíz de apio, se prepara cocinando las verduras con mantequilla, para luego ahumarlas y envolverlas con especias y mostaza. Sin olvidar el paté de setas confitadas y castañas -o de setas y caña de rábanos- con tofu blando para lograr su textura.
Forman parte de los nuevos menús con los que la chef arranca la temporada, la “Sangoreneta”, que incluye también escenas del mar Mediterráneo, a través de sus pescados y mariscos, y de un renovado menú “Novença”. Estarán disponibles igualmente en los próximos menús, aún no estrenados: un nuevo menú vegetariano que se alzará como culmen de una alternativa que llevan ofreciendo más de 15 años y un menú «Clásicos» con las recetas más emblemáticas de cada temporada por el 18 Aniversario del restaurante.
La defensa de la huerta valenciana se potencia más que nunca en las cocinas de la chef, quien basa su propuesta de La Salita en la acidez como hilo conductor, a través del trabajo con hortalizas, raíces y tubérculos, rescatando productos olvidados o menospreciados, y experimentando con vinagres.
Durante la pandemia, comenzó a estudiar la evolución de los productos en encurtido, y actualmente elabora incluso sus propios vinagres a partir de la fermentación de alcoholes, curándolos, madurándolos y aromatizándolos para crear vinagres madre que reutiliza posteriormente. Remolachas y zanahorias de colores, raíces desconocidas procedentes de rincones del mundo como el mashua, el crosne o la jícama, y otros tubérculos olvidados de la huerta valenciana plasman a la perfección la esencia de la cocina de Begoña Rodrigo.
La despensa de La Salita es viva, se renueva constantemente con aquello que ofrece cada temporada. Así, ciertos platos solo están presentes en el menú de manera puntual, cuando la huerta lo dicta, como las alcachofas, la carbonara de chirivía, o los higos con queso. Otros, ya han conseguido convertirse en iconos del restaurante a través de los años, y permanecen fijos en carta. Entre ellos, La Tiara, el All i Pebre blanco, o el Caldo encurtido de Algarroba.
Begoña Rodrigo fue nombrada fue nombrada, a finales de 2023, Mejor Chef Mujer de Verduras de Europa por la asociación We’re Smart World, y Segunda Mejor Chef Mujer de Verduras del Mundo, entre una selección de 10 cocineras.