Está claro, en este mundo existen dos tipos de personas: los que se comen el borde de la pizza y los que no. Enfrentadas desde tiempos inmemorables, estas dos posturas suscitan todo tipo de comentarios y debates en los que se cuestiona una sencilla razón, ¿puede el borde de la pizza determinar tu personalidad?
En Araldo Madrid, sus mejores representantes, -y no lo dicen ellos, han sido reconocidos durante 9 años consecutivos por la Guía Gambero Rosso, así como en el ranking top 50 de las mejores pizzerías de España 2023- profundizan en este eterno enfrentamiento y nos revela lo que verdaderamente dice este gesto de ti. Y tú, ¿cómo la disfrutas?
La pizza se ha convertido en un placer gastronómico para todos a lo largo y ancho del globo terráqueo. Unidos por una pasión, pero separados por la forma de disfrutarla… Y es que hay mil y una maneras de comerse una pizza. Un debate que siempre suscita mucho interés en la mesa. Que si uno se come los bordes, que si el otro se los deja… Por eso, Araldo, después de años de Investigación y Desarrollo, se adentra en este debate acerca de cómo se disfruta más de uno de los placeres gourmet de la vida.
Te comes el borde: Eres una persona decidida, tradicional, un fan incondicional de la pizza hasta tal punto, que de no ser porque la caja es de cartón, lamerías las esquinas de queso y tomate hasta sacarles brillo. Porque un pedazo de pizza no se acaba donde termina el queso, la masa es algo jugoso de lo que también se pude disfrutar, ¿no?
No te comes el borde: Ups, entonces eres de los que hacen distinción entre la vida “con” y “sin” sabor. Eres una persona que sabe lo que quiere y va a por ello, dejando de lado toda distracción y disfrutando de cada pequeño detalle. La combinación de ingredientes y texturas te resulta tan sabrosa, que bien podrías considerarla un pecado capital.
Lo mejor para el final: puede que sea por guardar lo mejor (el condimento) pero ¿Quién demonios es capaz de resistirse a la punta chorreante, sabrosísima y llena de queso del primer trozo de pizza? Mucha gente, y son personas decididas, con una gran personalidad y a menudo la necesidad de llamar la atención con sus gestos y acciones.
Los que doblan las rebanadas: Al parecer, las personas que pliegan sus rebanadas no tienen miedo de ensuciarse las manos. Y suelen hacer esto para ahorrar tiempo. Dichas personas son prácticas y evitan las complicaciones.
Los bordes de postre: Hay una pequeñísima parte de la población, que se deleita con cada bocado de su suculenta y sabrosa pizza, dejando apartados todos y cada uno de los bordes, perfectamente cortados y alineados a un lado del plato para saciar las ganas de más al final… Quizá incluso con el toque de algún aderezo como salsas o algún otro ingrediente. Porque con la pizza, nada es suficiente.
Con cuchillo y tenedor: Las personas que usan los cubiertos para comer su pizza son estables, tranquilos, organizados y metódicos. Por supuesto, son educados y protocolarios, y se aseguran de que todo el mundo tiene su porción de pizza antes de coger la suya.