VITAMINA D: LA HORMONA DE MODA MÁS DESCONOCIDA (Y NECESARIA) DE NUESTRO ORGANISMO

En esta época del año en la que, no solo aumentamos nuestro tiempo en interiores, sino que, además la radiación UVB que nos llega desde el sol es todavía menor, nuestro riesgo de sufrir insuficiencia/deficiencia de Vitamina D aumenta considerablemente.

Es bien sabido que la exposición al sol es la forma más efectiva (aunque no más segura debido al incremento en el riesgo de diversos tipos de cáncer de piel) de estimular la producción de vitamina D en nuestro organismo a partir del 17 oh dehidrocolesterol. Se cree que, de manera general, unos 15 minutos, entre las 10-15h del día, en brazos, piernas y cara resultan necesarios en la síntesis de vitamina D para conseguir niveles sanguíneos dentro del rango de la normalidad.

Sin embargo, sabemos por la evidencia científica, así como por la experiencia Clínica y personal, que en España entre el 60-88% de la población tiene niveles de vitamina D por debajo de la normalidad. Por lo tanto, es necesario abordar las necesidades de vitamina D de otra manera, más segura y, sobre todo, efectiva.

¿Por qué es tan importante esto? ¿Qué funciones claves tiene esta vitamina D que en realidad es una hormona? A continuación, Isabel Viña Bas, médico residente de Endocrinología y Nutrición en el Hospital Fundación Jiménez Díaz de Madrid, nos despeja todas las dudas.

Te contamos todo sobre el papel clave de la vitamina D y sus peculiaridades únicas, así como por qué IVB WELLNESS LAB@, vanguardia en suplementación clínica avanzada, es el mejor aliado para conseguir, mantener y optimizar la vitamina D3K2 sin descuidar el resto de los sistemas que contribuyen a la salud.

En primer lugar… ¿Qué es la vitamina D, es realmente una hormona o una vitamina?

La vitamina D es una hormona. Por definición, una hormona es una sustancia química que se produce en un órgano (o parte de él) y que tiene la función de controlar diversas funciones en sitios alejados de su lugar de producción. Por otro lado, una vitamina es una sustancia que nuestro cuerpo no tiene la capacidad de producir por sí mismo y que, por tanto, necesariamente se ha de tomar a través de la alimentación”.

“Por tanto, la vitamina D reúne las dos cosas: la vitamina D u hormona D se produce en la piel, el órgano con mayor superficie de nuestro cuerpo. A pesar de que lo puede producir nuestro cuerpo, esta hormona tiene que hacer muchos recorridos a lo largo de nuestro organismo para activarse: piel, hígado y nuestros riñones. Es decir, al tener tanto recorrido de síntesis y de transporte, la activación de la vitamina D puede verse alterada desencadenando su carencia o déficit”, cuenta Isabel Viña.

¿Qué hace la vitamina D en nuestro organismo y cuáles son las consecuencias de una vitamina D baja?

“Desempeña un papel importante en varios procesos metabólicos: es clave para absorber el calcio y el fósforo de la dieta, dos minerales claves que componen el esqueleto óseo. Asimismo, cumple funciones indispensables para el correcto funcionamiento del sistema inmune, favoreciendo el sistema inmune innato y modulando su respuesta, es decir, evitando respuestas inmunológicas excesivas. Por otra parte, es clave para una correcta curación de las heridas y para la adecuada síntesis y liberación de otras hormonas como la insulina.

Si no se toman medidas, en los casos más graves de hipovitaminosis D, pueden aparecer determinadas enfermedades, como las del metabolismo óseo (raquitismo, osteoporosis, osteomalacia), así como el debilitamiento de los huesos de la mandíbula, convirtiéndose en más propenso a sufrir periodontitis. La hipertensión, la diabetes, la fibromialgia y los trastornos neurológicos, como la esclerosis múltiple, también están relacionados con las deficiencias de vitamina D.

Para saber con certeza si tiene niveles bajos de vitamina D, es necesario realizar un análisis de sangre. Sin embargo, ciertos síntomas actúan como señales de alarma y pueden revelar inmediatamente si tienes una deficiencia:

  • Fatiga
  • Dolor y debilidad muscular
  • Dolores en huesos y articulaciones
  • Caída del cabello
  • Infecciones recurrentes
  • Alteraciones del estado de ánimo: estados depresivos, ansiosos, intranquilidad mantenida, problemas de sueño…”


¿Qué podemos hacer en casos estados carenciales de vitamina D?

“Siempre que se corrobore un nivel por debajo de la normalidad (menos de 30ng/mL) es indispensable recuperar sus niveles para optimizar numerosos procesos hormono metabólicos. Sabiendo que los alimentos no son fuente de esta vitamina, y que el sol no es una fuente recomendable como seguro de vitamina D (riesgo de cáncer de piel y múltiples factores que condicionan una producción no efectiva a nivel cutáneo, como la inclinación de los rayos del sol, cambios de latitudes, la contaminación, etc.), la suplementación de calidad, en dosis y formas adecuadas, se posiciona como nuestro mejor aliado para conseguir de manera segura y efectiva niveles óptimos de vitamina D en sangre.” indica Isabel Viña Bas.

VITAMINA D3-K2 de IVB Wellness Lab®: el mejor aliado

“Este suplemento es ideal para personas que tengan déficit de vitamina D y quieran alcanzar unos niveles óptimos por dos motivos. En primer lugar, por la concentración de vitamina D3 (1000 UI) y porque añade 45 mcg de vitamina K2 (que no interfiere en la coagulación como la vitamina K1), concretamente Menaquinona 7, la mejor patente del mercado y con más estudios científicos. Este tándem es clave puesto que la vitamina K2 evita que el calcio dietético que absorbemos gracias a la vitamina D3 se acumule en las arterias, en vez de dirigirse a los huesos, dónde debe estar constituyendo el esqueleto óseo. En definitiva, un suplemento diseñado para mejorar multitud de funciones, como el sistema inmunológico, el mantenimiento de la salud ósea, la absorción del calcio dietético. Con efectos neuroprotectores. Contribuye a la optimización de la fertilidad, a la reducción de la rigidez arterial, y a la activación de las células productoras de hueso”.

Sobre esta formulación de Vitamina D3-K2 de IVB Wellness Lab®, Isabel Viña Bas añade que “hablar de vitamina D sin acompañarla de K2 es quedarnos a mitad camino en seguridad y efectividad cuando se trata de suplementación con vitamina D. Más no es mejor, sino que mejor es mejor. Y este producto ofrece la mejor formulación para alcanzar los niveles óptimos de vitamina D sin riesgos”.

No Comments Yet

Leave a Reply

Your email address will not be published.